sábado, 12 de abril de 2014

Bambúes



Lo vi en un documental de La Dos;
parece ser –lo dicen los expertos–
que aún a día de hoy queda un misterio:
el de la floración de los bambúes.

Estas plantas leñosas crecen toda su vida
como flautas inciertas o huesos infinitos,
crean tupidos bosques en los que se alimentan
esos seres de cuento que son los osos panda
y millones de humanos sobreviven
de su tala, la venta de sus cañas,
el consumo de hojas y otras manufacturas.

No se sabe muy bien, pero parece
-lo dicen los expertos- que algunas de estas plantas
crecen veinte centímetros diarios;
otras, mientras,
pueden llegar a tener largos ciclos
de crecimiento, no se sabe cómo
de largos, ni por qué.

Pero el mayor misterio que rodea al bambú
es el de su destino.

Un día, sin saber cómo ni cuándo,
florecen los bambúes.

Es el momento álgido de la vida de todos,
el de la floración.

Pero sucede que –nos dicen los expertos–
los bambúes                cuando florecen                     mueren.

Estamos rodeados de metáforas tétricas,
lo dicen los expertos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario